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Para aquellos que no salgáis del Hemisferio Norte durante las noches de la primera quincena de agosto se puede observar un fenómeno curioso que acude puntualmente a la cita estival, se trata de las Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo ya que normalmente tienen su apogeo cerca de la noche de San Lorenzo (10 de agosto).

Este es un fenómeno de lluvia de meteoritos muy singular por la gran cantidad de aerolitos que atraviesan la noche. Su origen es debido al polvo cósmico que va dejando el cometa Swift-Tuttle durante su trayecto. Es ahora en agosto cuando la Tierra intercepta las partículas del cometa que al chocar con la atmósfera entran en ignición dejando un halo luminoso que da vida a la tranquila noche veraniega.

Perseida cruzando el cielo fotografiada desde una estación meteorológica

La fecha de mejor visión suele ser la de la noche del 12 de agosto, aunque también se pueden ver esporádicamente cualquier día entre el 17 y el 24 de este mismo mes. Eso sí, tenderemos que esperar a que las nubes no hagan acto de presencia sino nos quedaremos sin Perseidas.

Para poder ver con claridad las Lágrimas de San Lorenzo es recomendable buscar un lugar oscuro, a poder ser en una zona aislada, rural o en la montaña lejos de la contaminación lumínica de las grandes ciudades, así se puede apreciar mejor la lluvia de estrellas. También es preciso dirigir la mirada en dirección noreste que es la indicada para detectar la entrada en escena de las Perseidas.

Vídeo informativo de la lluvia de estrellas de 2007

Así pues si tenéis ocasión no os dejéis perder este peculiar suceso y de paso pedir algún deseo. Con tantas estrellas fugaces que caen es más fácil que alguno de ellos se cumpla.